Sola, pero fiel a mí misma

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Por Naranjasrosas, 5 de diciembre de 2008


DOP, claro que no nos reimos, al menos a mi no me hace gracia tu situación, porque yo he vivido una vida muy similar a ti. Desde que nací respiré en mi casa el opus dei, no habia otros curas que los de la obra, no había otros campamentos que los de la obra, no había otros santos que los de casa, no habia otra bendicion de la mesa que la de los centros, no había mas colegios que los de la obra y no habia mas adornos por la casa que burritos y patitos...

Si salías de ahi solo ibas a encontrar confusión y mala formación, y por supuesto jamás encontrarías en ninguna parte el cariño y el cuidado que te dan en la obra.

Me casé con un sn, asi que seguia encerrada en la misma burbuja, un poco asfixiada, pero segura, eso si, te cuidan y te protegen de tal manera que no te dejan crecer, no maduras, no sufres lo que sufre una persona normal, aunque si sufres otras cosas, pero al menos tienes las necesidades resueltas.

A tí como numerario no te va a faltar nunca un techo, ni un medico, ni un sacramento, ni un cuidado, siempre vas a llegar a fin de mes y te van a rodear de afectos si te enfermas y te mueres. Nunca vas a estar solo.

A mi como sn nunca me va a faltar la tranquilidad de que si me porto bien, y mi vida matrimonial discurre normalmente, siempre voy a tener la proteccion de mi marido y de casa, nunca voy a estar sola e incluso puedes aprovechar algunas de las ofertas laborales que se presentan en colegios, unin a fijar en tus universidades o centros. Se van a fijar en tus hijos, y los van a cuidar, proteger y formar. ¿Qué mas quiero?

Ademas tanto tu como yo, si hacemos lo que nos dicen, tenemos asegurada la salvacion de nuestra alma, y quien sabe, con suerte y una enfermedad terminal, y rodeada de la familia, podriamos llegar a los altares con poco esfuerzo, viviendo las consignas

Me parece una vida muy cómoda, y muy santa para quien realmente busque eso, y Dios lo premiará. Pero convengamos que si uno ya no está cómodo, si necesita irse del centro para respirar, si te das la satisfaccion de ir a esquiar sin que tu director se entere, y eso te hace bien, es que te ha llegado la hora de romper el cordón, así que no vayas a tomas ningun antidepresivo que te quite las ganas de pensar y piensalo solo y bien, es un consejo de amiga.

Yo, particularmente, a los 44 años renuncié a esos cuidados y elegí crecer y pensar por mi misma. Decidí equivocarme, aprender de mis errores, poner mis debilidades en manos de Dios, pecar libremente y confesar cuando la conciencia me lo indicaba, descansar cuando estoy cansada, despertarme cuando he terminado de dormir, dar dos o tres vueltas en la cama sin remordimientos mientras pienso que tengo que hacer y que me voy a poner, ponerme lo que quiera sin pensar si aqui es un poco ajustado y me van a mirar los hombres, decidi admitir que me gusta que me miren los hombres, decidi que tengo derecho a mirar a los ojos de las personas con las que hablo sean hombre, cura, o mujer. Decidí elegir mi dirección espiritual, decidi vivir el espiritu del evangelio sin mas, decidi hacerme amiga de todos, sin acepcion de personas, tambien de esa vecina feisima que tengo, que para colmo le faltan dientes porque esta enferma, y que me decian que no era pitable por razones obvias. Decidi tener amigas y amigos, y contar mi intimidad a quien me diera confianza. Decidi disfrutar de las homilías de los párrocos y confesar fuera del confesionario si esa es su costumbre, permitiendo que ese sacerdote optara por el modo mas comodo para él de confesar, sin denunciarlo al vicario del lugar. Decidí dejar de ser Torquemada y vivir pensando en todos los errores que se cometen en las parroquias, decidí leer a Nietzche, a Antony del Mello a Confucio y a Von Balthazar. Decidí decir que no a personas sin culparme de estar diciendo que no a Dios. Decidí buscar a Dios en lo normal de cada dia, y me sorprendi al encontrarlo tambien fuera de los centros de la obra. Decidí solicitar la nulidad de mi matrimonio, porque era una farsa. Y decidí explicarle a mis hijos que la iglesia no es un ejercito, que no hay clase de tropa y generales, que la mujer participa y debe pensar, que una mujer que se pasa la vida velando porque un suelo brille desaprovecha muchas potencias que Dios le ha dado, que una mujer que siempre está dispuesta a cumplir con su marido, que siempre esta arreglada para el, que nunca le dice que no, termina aburriendo al marido y aburriendose ella mucho mas.

Me quedé con mis 6 hijos, sin seguridad de nada, ya que hasta ahora me habia dedicado a ellos, a mi marido y a la obra. decidí buscar trabajo fuera de las alternativas de casa. Decidi que no me importaba no tener años suficientes para jubilarme y que eso no lo podia comprar pagando con el acto sexual a mi marido, al cual no quiero. Decidí que no me importaba que las librerias de la obra no vendieran mis libros.

Y tenía tanto miedo como tú, pero lo hice, y sali de la neurosis paralizante de estar tan protegido que desconfias de tomar tus propias decisiones.

No me importo dar un disgusto a toda la parentela de la obra, incluidos mis padres, mayores, porque aunque los quiero y me da pena que vivan eso, como decia nuestro padre los hijos son de Dios y hay que respetar su camino, por tanto no tenían derecho a retenerme.

Y me quede sola, pero fiel, muy fiel a mi misma, y por tanto, a Dios, que me ha creado asi, como soy. Pero enseguida descubres a mucha gente que tambien es gente, que tambien tienen valores humanos, que tambien te cuidan y te quieren y que se dejan cuidar y querer.

Me quedó una amiga numeraria, porque fue la unica que aceptó ser mi amiga normalmente. Aqui nadie manda, yo le cuento mis cosas, pero que ella tambien me cuente las suyas, yo aconsejo y me dejo aconsejar, ella me cuida, yo a ella tambien. Le cuento de mi vida y no admito valoraciones morales, es un dialogo normal, mientras ella lo soporte seguiremos siendo amigas.

La vida, cuando te cuesta, es maravillosa.

Y no te estoy diciendo que dejes de ser de la obra, solo te digo que no vivas ambiguedades, que la vida es o dentro o fuera, que si un numerario no soporta la vida de un centro le pasa como cuando una mujer no soporta al marido, lo tiene que dejar, y eso no es pecado, pecado son otras cosas.

Y tambien te digo que no puedes tener miedo, yo tenia miedo pero me di cuenta que tenia una edad donde tener miedo a la vida fuera de la obra era volverse viejo de golpe. los 40 años son maravillosos, es una edad donde puedes empezar muchas cosas, en cuento a profesion, relaciones afectivas...etc. Puedes casarte o no, tener hijos o no, cambiar de trabajo, conocer cosas nuevas, y disfrutar de la vida que Dios te ha dado con el convencimiento de que El quiere que seamos felices. Y ese es nuestro deber principal. Lo demas se dara por añadidura.

Quizas me meto demasiado a decirte cosas, si te molesta perdoname, pero me parece que este espacio esta para eso, para podernos sincerar y relacionarnos con personas que han pasado o pasan por lo mismo.

Un abrazo fuerte y te deseo mucha mucha suerte, y mucha mucha fuerza

Naranjas (cristina)


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