Los agregados considerados no aptos para ejercer el liderazgo

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Por Ex-apéndice, 5.11.2008


Mi nick, como es fácil adivinar, obedece al hecho de que, en el opus, los agregados no son más que eso: un apéndice añadido (agregado) a la secta, alrededor de 1950, con veinte años de retraso, sobre la fundación del opus.

La “agregación” se gestó y se consumó, en plan chapuza, quizá para salir al paso de la acusación de elitismo que en los círculos eclesiásticos recibía la obra de Escrivá, en aquellos años en que el santo apareció por Roma (a partir de 1946) y fue reducido al silencio (“il cerco” famoso). No hay que olvidar que por entonces estaba empezando a sonar aquello de la “la Iglesia de los pobres”.

Había que demostrar que el opus no era elitista y en él cabían todos los hombres y mujeres fuera cual fuera su condición personal. Hubo que hacer una pirueta de saltimbanqui para abrir las puertas a tanta gente inicialmente excluida del opus.

Parte muy importante en la configuración jurídica de la nueva rama del opus hasta entonces inexistente, fue Amadeo Fuenmayor, inseparablemente unido a la historia de los agregados.

De todas formas los agregados nunca fueron ni son considerados dentro del opus como miembros similares a los numerarios, sino muy distintos a ellos y separados por varios muros impenetrables e insalvables; y no simplemente por el hecho de no hacer vida de familia, como se quiere hacer creer, en la literatura opusina sobre el tema.

La causa principal de la separación radical entre ambas ramas del opus, solo unidas en la persona de jefe principal de la organización, es que, a diferencia de los numerarios, los agregados son considerados como no aptos para ejercer el liderazgo propio de los cargos directivos (de gobierno o de dirección espiritual de cierto rango que únicamente son atribuibles a los numerarios.

Por eso dentro del opus se vive una auténtica separación, incluso material entre una rama y otra, parecida a el muro berlinés o a otros muros históricos, por otra parte muy frecuentes en la historia de las órdenes religiosas (recuérdese a los hermanos legos y similares entre los jesuitas, franciscanos, dominicos etc). Nada nuevo.

Menos mal que en opuslibros nos vamos enterando a través de los testimonios de algunos agregados y agregadas de cual es la verdad sobre el tema. ¡Animaos a escribir agregados que me leéis! Seguro que sabéis muchas cosas que no deben quedar ocultas en la penumbra opusina que quizá sea en algunos casos puro hermetismo y lenguaje críptico.



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