El caso de la unión Lumen Dei como antecedente

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Por Trinity, 19.12.2008


De ordinario, procuro ser lo más escueta posible en mis correos. Hoy me vais a disculpar que me extienda fuera de lo habitual. Pienso que la ocasión lo merece.

Muchas veces hemos manifestado en esta Web nuestra decepción porque la Santa Sede parece quedarse impertérrita ante las denuncias que viene recibiendo sobre los abusos que se están cometiendo en el Opus Dei bajo el amparo de su aprobación eclesiástica. También hemos manifestado nuestra preocupación ante la probabilidad de que, aun en el supuesto de que Roma hiciera algo al respecto, los dirigentes de la Prelatura se organizarían, como han hecho siempre, para neutralizar esa medida y seguir haciendo de su capa un sayo.

Pues bien, pienso que la intervención de ayer del número dos de la Iglesia, en relación al contencioso entre los anteriores dirigentes de Lumen Dei y el Comisario papal para esta asociación eclesial, permite abrigar esperanza de que las autoridades del Opus Dei no lo van a tener tan fácil hoy en Roma, como en otros tiempos.

Copio a continuación tres documentos. Como es sabido, ante ciertos abusos que se venían sucediendo en la Unión Lumen Dei, Roma destituyó a sus autoridades y puso al frente de la institución a Mons. Fernando Sebastián. Los anteriores dirigentes interpusieron un recurso ante el Tribunal Supremo de la Iglesia (la Signatura Apostólica), para evitar que entrara en vigor esa medida. Pero Roma rechazó el recurso (Documento I). Ante ello, los dirigentes de Lumen Dei destituidos, haciendo alarde de desobediencia, dirigieron una carta a los miembros de la Unión Lumen Dei (Documento II) diciendo que no hicieran caso ante esas calumnias. La reacción del Papa no se ha hecho esperar: ayer, el Cardenal Secretario de Estado publicó una carta (Documento III), reafirmando las decisiones vaticanas anteriores, y dejando claro que quien no se someta a la nueva autoridad puesta por el Papa –manifestándolo con una carta firmada de puño y letra- quedará fuera de la institución.

Pienso que esto explica que últimamente no paran de pedirnos que recemos por los colaboradores del Papa (ya sabéis que en la Obra, cuando quieren hacer insinuaciones descalificadotas respecto de alguien, suelen decir que hay que encomendar mucho a fulanit@). En la Carta del Prelado en diciembre, en las cartas que nos cuentan las tertulias de Mons. Echevarría en las últimas fiestas y en los círculos de las últimas semanas, es la cantinela constante.

Motivos tienen para andar nerviosos.


El arzobispo Sebastián confirmado como Comisario Pontificio de Lumen Dei

Por un decreto de la Signatura Apostólica, según informa esta Asociación

Por Nieves San Martín, viernes, 19 septiembre 2008 (ZENIT.org).- La Signatura Apostólica ha confirmado a monseñor Sebastián como Comisario Pontificio de Lumen Dei, según ha podido saber Zenit a través de un comunicado enviado a esta agencia por la Secretaría General de Lumen Dei.

El comunicado informa que, con fecha 12 de septiembre, la Santa Sede, por medio de la Signatura Apostólica ha resuelto el recurso presentado por las autoridades depuestas de Lumen Dei: "Habiendo sometido a examen cuidadosamente el asunto, en el Congreso celebrado el día 12 de septiembre, ante el Excelentísimo Prefecto, decretó: Que la pedida suspensión no debía ser concedida y que de hecho no sea concedida".

La Signatura Apostólica recuerda en su decreto -explica la Secretaría General- que por dos veces había comunicado que el recurso no suspendía el nombramiento y facultades del Comisario Pontificio, y cómo lejos de ser obedecido por las autoridades depuestas, no han hecho sino poner dificultades.

"Este Supremo Tribunal -dice el decreto- ha intervenido dos veces para negar los efectos suspensivos ‘ipso iure' del recurso interpuesto: en primer lugar, de un modo más general, el día 16 de junio de 2008, por instancia del Eminentísimo Prefecto de la Congregación para los Institutos de vida consagrada y las Sociedades de vida apostólica, y más tarde por carta dirigida al Reverendo Recurrente, fechada el día 5 de agosto de 2008".

"A pesar de lo cual -añade el documento vaticano--, la ejecución del decreto impugnado y la actuación del Comisario Pontificio, hasta ahora no han sido ejercidos sino parcialmente, debido a las muchas dificultades y conflictos surgidos, incluido el recurso a las autoridades civiles".

Más adelante, la misma Signatura Apostólica expone los motivos de su decisión entre los que la Secretaría general de Lumen Dei destaca los más significativos.

Ante el argumento de que Lumen Dei es una asociación privada, el decreto dice: "No faltan autores que, movidos por razones no despreciables, no excluyen la designación de Comisario y la remoción de los Moderadores también para las asociaciones privadas por parte de la autoridad eclesiástica; esta opinión, entre otras razones, se apoya en la función que se reconoce a la autoridad eclesiástica respecto de todas las asociaciones".

"Hay que someter a un riguroso análisis la naturaleza de cada asociación, que no solamente aparece por la letra de un artículo de los Estatutos, sino por la consideración del origen, la evolución, el fin, las obras y los vínculos que la asociación mantiene", establece el decreto.

Y respecto a la protesta de que este nombramiento de la Santa Sede podría producir daños graves e irreversibles, la Signatura Apostólica dice: "Muchos de los daños que se dicen haber padecido o que puedan venir, parece que son más imputables a la misma asociación que a la mera ejecución del acto impugnado; con razón el Eminentísimo Prefecto de la Congregación advierte a este propósito que ‘Todo es consecuencia de la obstinada oposición de "Lumen Dei" al decreto con el cual el Dicasterio ha provisto para dar una ayuda eficaz para superar la crisis en la que se encuentra la Asociación'. Si los miembros de la Asociación, aún estando pendiente el recurso, hubiesen colaborado a la ejecución del acto impugnado, muy probablemente no hubieran tenido que denunciar los perjuicios en cuanto a su situación económica y a su buena fama".

El Comisario Pontificio, explica la Secretaría General en su comunicado, "en el ejercicio de su oficio, está sometido a las mismas normas por las que la asociación se rige hasta ahora, como anotaba el Eminentísimo Prefecto de la Congregación: ‘Con el nombramiento del Comisario Pontificio no cambiamos las normas estatutarias que en la Unión Lumen Dei regulan la gestión de los bienes vinculados de cualquier modo a la institución'".

Para cualquier información adicional, consultar www.unionlumendei.es


Carta de los directivos cesados de Lumen Dei a sus miembros

MAESTRO RIPOLL.14
28006 MADRID
TEL. 91 562 75 43
FAX 91 561 77 27
e-mail: info@lumendei.org

Madrid 23 de septiembre de 2008

Para nuestros Colaboradores, Amigos y Ejercitantes.

Muy estimados en el Señor.

El Espíritu Santo habite siempre en nuestras almas, nos dé a conocer su querer y éste perfectamente cumplir.

"¡Oh, Madre, fuente de amor!, hazme sentir tu dolor para que llore contigo...haz que su cruz me enamore y que en ella viva y more... " (Himno Stabat Mater)

Hace algunos días, en la fiesta de nuestra Señora de los Dolores, la Santa Madre Iglesia nos invitaba a profundizar en los sufrimientos de la Santísima Virgen y a acompañarla en su dolor junto a la cruz de su Hijo. Así hoy, deseamos compartir con ustedes la angustiosa situación por la que atraviesa nuestra Asociación.

Ustedes, corno María al pie de la cruz, han estado junto a nosotros en muchas circunstancias; hemos compartido momentos de gozo, de intensidad espiritual, de dolor. Gracias a ustedes se han incoado, desarrollado y mantenido a lo largo del tiempo diferentes obras de Lumen Dei. Consideramos que, en justicia, debemos darles a conocer algunos puntos respecto a nuestra actual situación. Mucho de lo que actualmente se publica en los medios de comunicación e Internet y mucho de lo que se dice NO ES LA VERDAD.

Algunos de ustedes ya conocen que desde hace tres años venimos sufriendo una fuerte campaña de calumnias contra miembros destacados de Lumen Dei. Por todos los indicios pensamos que se intenta no sólo desacreditarnos, sino destruir nuestra pequeña obra. Nos duele profundamente que sean hermanos, que un día formaron parte de nuestra Familia "Unión Lumen Dei", los que hayan iniciado, continuado y propagado estas calumnias. En total no pasan de ser unos 20 entre miembros y ex­miembros, en estos tres años menos del 3,5% del total de miembros; una minoría que está haciendo mucho daño y sembrando la confusión. El resto de los miembros, más de 650, estamos muy unidos.

Esta campaña de calumnias se ha recrudecido con motivo del nombramiento de la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y Sociedades de Vida Apostólica de un Comisario para nuestra Asociación, en" la persona de S.Ê.R. Mons. Fernando Sebastián Aguilar, cmf, arzobispo emérito de Pamplona y Tudela. Desde que se supo su nombramiento se manipuló la noticia aduciendo como causas la inmoralidad y el desfalco económico. En nuestras notas de prensa aclaramos estas falsedades.

Recientemente se ha hecho público que el Tribunal de la Signatura Apostólica ha negado la concesión de efectos suspensivos que habíamos solicitado, hasta que se estudie la validez del nombramiento, que actualmente está en litigio. Se pretende hacer creer que el Comisario ha sido "confirmado" en su cargo por el Santo Padre. Por los daños que esto ha causado y sigue causando hemos vuelto a solicitar los efectos suspensivos. No se trata de rebeldía o capricho, sino de una seria objeción de conciencia. Humildemente creemos que las razones que nos mueven no son baladíes. Por otra parte nuestra objeción la hemos canalizado según los cauces que la misma Santa Madre Iglesia da para estos casos. No entendemos por qué se insiste tanto en hacer creer a la opinión pública que somos desobedientes e inmorales.

D. Ángel David Martín, publicó -refiriéndose a Lumen Dei- por Internet una reflexión de la cual extractamos: "...cuando personas que yo siempre hubiera pensado que compartían una idea un tanto automática de la obediencia se deciden a tomar una actitud de resistencia, algo me lleva a pensar que pueden tener razón...lo más cómodo hubiera sido callarse... ahora saben que, no solamente han sido objeto de descalificación sin apelación posible, sino que... los motejarán... con el estigma: "desobedientes"...¿es tanta su corrupción que se atreven a resistir a los mandatos imperativos de la Santa Sede? ¿O están defendiendo, con lo poco que ya les queda, su propia dignidad como creyentes y la fidelidad al legado del Fundador?...se ha desatado una campaña sistemática contra Lumen Dei..."


Sólo para darles luz les acercamos los siguientes datos:

1° El Comisario, en las cuatro conversaciones que tuvimos con él, nos manifestó que, entre las indicaciones que había recibido, se encontraba la exigencia de retirar los recursos que habíamos interpuesto en legítima defensa, antes de su nombramiento, en la Signatura Apostólica.


2° También nos solicitó que le otorgáramos todos los poderes de nuestra Asociación Privada y la firma en nuestras cuentas bancarias. Le expusimos que no debíamos hacerlo: se trata de bienes privados, no eclesiásticos. Muchos miembros, entre ellos matrimonios, entregamos nuestras posesiones y dinero a la Asociación. Nuestra gestión económica se rige por el derecho civil, no por él canónico. Sin embargo Mons. Fernando Sebastián ha solicitado su inscripción en el Ministerio de Justicia, en orden a poder tener bajo él todo el patrimonio de la Asociación. Ha conseguido amplísimos poderes notariales y, con ellos, ha intervenido nuestras cuentas bancarias de España, poniéndose como único titular de las mismas, dejando sin firmas a los miembros (siempre las teníamos mancomunadas). Todo ha sido sin previo aviso.

Él no ha pagado los sueldos de algunos trabajadores, ni a los proveedores. En nuestras Residencias de Ancianos algunos proveedores ya no nos abastecen de lo que los abuelos necesitan porque el Sr. Comisario se ha negado a pagarles incumpliendo el contrato privado que tenemos con cada residente (aunque gracias a Dios hemos recibido donativos en alimentos y así a los ancianos nos les falta lo necesario). Incluso algunos de nuestros trabajadores han sido despedidos sin ninguna razón. Dos familias de inmigrantes se quedaron literalmente en la calle. ¡Y esto en nombre de la Iglesia! Lo sentimos profundamente. El Comisario nos ha dicho que no se responsabiliza de los daños emergentes, lucros cesantes, responsabilidades civiles y penales y posibles demandas judiciales.

Curiosamente en la página Web elaborada por los colaboradores del Sr. Comisario se da un número de cuenta bancaria para ayudar a la obra del P. Molina. Esa cuenta la han abierto ellos, no sabemos para qué si todas las cuentas de Lumen Dei las tiene el Sr. Comisario. Además ellos no están atendiendo ninguna obra asistencial. Las estamos atendiendo nosotros.

También divulgaron que habíamos retirado "indebidamente" de nuestras cuentas más de trescientos mil euros. Falso. Esto se contesto en una nota de prensa y ya se tomaron las medidas del caso.


3° Muy a nuestro pesar percibimos "parcialidad" en el proceder del Sr. Comisario: por ejemplo se dice que el Comisario no encontró acogida en los miembros de la Asociación. Sin embargo Mons. Sebastián visitó nuestra sede los días 29 de mayo, (en que incluso celebró la Santa Misa para la comunidad) 12 de junio, 1 y 2 de julio. Lo único que le pedimos los miembros fue que, por favor y para evitar daños, esperara la decisión de la Signatura Apostólica sobre la validez de su nombramiento, para comenzar a ejercer su cargo. Incluso vimos con él mismo otras alternativas válidas para presentar a la Congregación.

No sabemos qué pudo ocurrir en el ánimo de Mons. Sebastián, lo cierto es que se ha rodeado de las personas que nos han calumniado, algunos de ellos expulsados de Lumen Dei por faltas gravísimas, y les está dando cargos de responsabilidad en la Asociación y trabajo en el colegio que allanaron violentamente. Se está beneficiando, en la práctica, a una persona (socialmente "muy bien vista"), a su familia y a sus amigos más íntimos.


Por otro lado no es posible llegar a una reconciliación con personas que, después de haber causado grave daño a la Asociación por difundir graves e inmorales calumnias, incluso entre los niños de nuestros colegios, no reconocen su error, ni están arrepentidos y continúan haciéndonos daño, a nosotros y a quienes nos apoyan. Desde que el Sr. Comisario ha optado por depositar en ellos su confianza, no hemos podido llegar a un acuerdo con él.

Ahora nuestros calumniadores quieren hacer creer que nunca crearon ni propalaron nada contra nosotros, que eso de las calumnias es invento nuestro y que el principal problema de Lumen Dei es que no aceptamos al Comisario y entonces desobedecemos al Santo Padre. Al Sr. Comisario no lo nombró el Santo Padre. Nosotros estamos dispuestos a obedecer a toda autoridad legítima, siempre que no medie la ofensa a Dios. El problema no comenzó con la desobediencia de Lumen Dei al Comisario, sino por grave campaña calumniosa que encontró eco en algunas autoridades de la Iglesia. Por otra parte la causa del nombramiento del Comisario, según nos escribió a los miembros él mismo, es "la recuperación de la paz y la comunión en el seno de Lumen 'Dei'". Paradójico resulta que quienes se separan de nosotros y nos calumnian y acusan (acusaciones falsas y, por supuesto, no probadas), propagan que hay desunión en la Asociación, rodean al Comisario, que los acoge y les da puestos de trabajo y responsabilidad en la misma Asociación, porque -según ellos dicen- quieren ser obedientes a la Iglesia. Sencillamente inexplicable.

Lejos de sentirnos apoyados y entendidos, los miembros nos sentimos fuertemente presionados por las medidas que están empleando el Sr. Comisario y sus colaboradores. Según sus mismas palabras: si aceptamos al Comisario se acaban los problemas, pero si no, no cesarán las dificultades. Así lo han dicho el Sr. Comisario y sus colaboradores a distintas personas (miembros, trabajadores o allegados). Han intentado cortamos todas las líneas telefónicas y de ADSL de nuestra Sede Central de Madrid. Nos han quitado el servicio de telefonía móvil, sin previo aviso. Una persona de confianza, de experiencia y que sabe del tema nos avisó que nuestras líneas telefónicas están intervenidas, es decir que podrían escuchar nuestras conversaciones. Hemos recibido comunicaciones no oficiales y burofax con apelativos agresivos e hirientes y amenazas de denuncias ante la opinión pública. Una de nuestras trabajadoras y familiar de un hermano de Lumen Dei fue amenazada que "algo malo" le pasaría a ella y a su hija -menor de edad- si el hermano no aceptaba al Comisario... A otros miembros les han ofrecido cargos de confianza y ayudas o les han amenazado con la misma expulsión de la Asociación si no ejecutan lo que les exigen...

Toda esta situación se ha comenzado a publicar por los medios de comunicación desfigurando la verdad y tergiversando datos. Además, por los medios de comunicación e Internet, se están diciendo "barbaridades" sobre nosotros, nos están desprestigiando, se está sembrando la desconfianza hacia nosotros. Pareciera como si se quisiera ejercer sobre nosotros una fuerte presión psicológica para que no obremos conforme a lo que vemos recto ante Dios.

Nos preguntamos con dolor si realmente se ha reparado en la cantidad de personas que están siendo damnificadas: más de 700 alumnos de nuestros colegios de Madrid, aparte del personal docente y otros trabajadores; nuestros proveedores; los ancianos de nuestras Residencias, las muchas personas beneficiadas en nuestras misiones; y los más de 650 miembros, especialmente los matrimonios de Lumen Dei, sus hijos... Nos planteamos si realmente Mons. Fernando Sebastián Aguilar conoce todo lo que se está diciendo y haciendo en su nombre.

Por último no podemos dejar de darles las gracias: Muchas gracias a todos por sus oraciones y por su interés por nosotros. Gracias por el apoyó moral', el ánimo que muchos de ustedes nos infunden. ¡Muchas gracias! También agradecemos la ayuda económica y material que nos están brindando: alimentos, medicinas para los miembros enfermos, dinero para cubrir las necesidades más urgentes. Los hermanos, las hermanas y las familias misioneras se están manteniendo gracias a sus ayudas, a los alimentos que nos han regalado o conseguido: fruta, leche, pescado, pan... ¡Muchas gracias!

Si desean más información pueden dirigirse a nuestras sedes, pueden contactar con nosotros también por e-mail: aclaracioneslumendei(g),gmail.com. Existe una página Web elaborada por un grupo de colaboradores que pueden visitar www.lumendei.com

Por último deseamos reiterar con total convicción nuestra completa adhesión a la Jerarquía de la Santa Madre Iglesia, en cuyo seno queremos vivir y morir siendo fíeles a nuestra vocación. En la historia de la Iglesia y de los santos, Dios en su bondad, a veces ha permitido malentendidos, persecuciones.. .pero, a pesar de las debilidades y deficiencias que tenemos todos los hombres, Dios siempre ha conducido a su Iglesia, siempre la ha protegido. El, Padre Bueno y Providente, es tan inmenso en su amor, en su sabiduría y en su poder que puede sacar aun de las situaciones más adversas grandes bienes. "Sabemos que Dios ordena todas las cosas para bien de los que lo aman..." (Rom. 8,28)

En las manos maternales de la Santísima Virgen ponemos toda esta situación y nuestra aflicción. De Ella queremos aprender a amar sin límites ni condiciones, con su Inmaculado Corazón. De Ella queremos aprender a perdonar y a ser capaces de dar la vida por quienes nos hacen daño y nos persiguen. Porque no hay amor más grande que dar la vida. Por favor, recen por nosotros, que seamos realmente "Luz de Dios", que siempre y en todo busquemos la gloria de Dios y el bien de las almas.

"El Padre, ese debe ser nuestro único apoyo... Confía, aunque vengan tribulaciones. Tienes por Padre a Dios, no se le escapa una lágrima de tus ojos. Confianza, pues, en Él... " (P. Rodrigo Molina, L.D.)

Omnis Terra Gloria Dei


Carta del cardenal Secretario de Estado, Tarsicio Bertone, a los miembros de Lumen Dei

Publicado por Ecclesia Digital, jueves, 18 de diciembre de 2008

Vaticano, 5 de diciembre de 2008

A los miembros de LUMEN DEI

Muy queridos en el Señor,

Sacerdotes, Hermanos, Hermanas y matrimonios:

En su solícita providencia a favor de su Iglesia y por el bien espiritual y material de sus hijos, Dios no deja de promover familias e instituciones que faciliten a los fieles vivir intensamente su consagración a Dios y su generosa entrega al servicio de los hermanos. Una de estas obras, con la cual se ha visto recientemente enriquecida la Iglesia de Dios, es la Unión Lumen Dei, de la cual todos vosotros, de una u otra manera, formáis parte. Os escribo estas líneas, por mandato expreso del Santo Padre, con el deseo de aclarar vuestras dudas y de expresar claramente su voluntad.

En virtud de la misión que el Santo Padre le tiene confiada, y en ejercicio legítimo de su competencia, la Congregación para los Institutos de vida consagrada y Sociedades de vida apostólica, con fecha 15 de mayo, nombró Comisario Pontificio con atribuciones de Presidente General de las Asociaciones “Unión Sacerdotal Lumen Dei” y “Unión Lumen Di” a S.E. Reverendísima Mons. Fernando Sebastián Aguilar, CMF, confiándole por el tiempo que sea necesario, a juicio de la misma Congregación, el gobierno de Lumen Dei, en toda su variada realidad, con las atribuciones necesarias para promover el bien de esa querida Institución.

Con las presentes letras, por voluntad expresa del Santo Padre y en su nombre, confirmo las decisiones adoptadas por la Congregación para los Institutos de vida consagrada y Sociedades de vida apostólica, con la seguridad de que las aceptaréis fielmente, a fin de que con la leal colaboración de todos vosotros favorezcan el crecimiento y la consolidación de Lumen Dei como una institución católica, en perfecta comunión eclesial, al servicio de la evangelización y de la atención a los más pobres, así como a vuestra propia santificación

Para lo cual el Santo Padre requiere que todos los miembros de Lumen Dei, sacerdotes, hermanos y hermanas, y matrimonios, reconozcáis al Comisario Pontificio como único Superior legítimo de todas las personas e instituciones que constituyen la totalidad de Lumen Dei, y en consecuencia le prestéis sincera obediencia religiosa, según piden vuestras Constituciones y el espíritu de vuestros fundadores, viendo en él al Comisario Pontificio y al representante de la Iglesia que ha recibido el encargo de ayudaros y guiaros en esta importante etapa de vuestra consolidación como Asociación católica.

En diálogo con la Congregación para los Institutos de vida consagrada y Sociedades de vida apostólica, y bajo la dirección del Comisario Pontificio, debéis encontrar la forma jurídica definitiva más adecuada para Lumen Dei siguiendo las sugerencias expresadas en los últimos números de vuestras Constituciones.

Pido al Señor y a Ntra. Sra. del Encuentro con Dios que os ayuden a colaborar con sincera obediencia en esta importante coyuntura, para que todos los miembros de Lumen Dei podáis vivir vuestra hermosa vocación de consagración radical a Dios y de generoso servicio a los más pobres, en estrecha comunión de amor y obediencia con la Santa Madre Iglesia. Cada uno de vosotros tendréis ocasión de hacerlo manifestando por escrito al Comisario Pontificio la voluntad de vivir vuestra vocación según las Constituciones en estrecha comunión con la Santa Madre Iglesia. Si alguno no se sintiera animado a vivir en clara y alegre obediencia estas decisiones y recomendaciones, o creyera en conciencia que no es éste su camino, tendrá que buscar en otro lugar su camino de salvación y santificación con la luz y la gracia del Espíritu Santo.

Con mi saludo y bendición

+ Tarsicio Cardenal Bertone



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